martes, 6 de enero de 2009

García Lorca no debía sentir una gran simpatía hacia la Guardia Civil. Este fragmento de su "Romance" dedicado al Benemérito Cuerpo lo demuestra. No sé si fotos como ésta, tomada por el americano William Eugene Smith le sirvieron de inspiración.
Los niños de la posguerra, a pesar de la democracia y los cambios que de buen seguro se han producido en el interior de "la Benemérita", no podemos dejar de sentir el viejo acojono que debió quedar incrustado en algún lugar del ADN.


Los caballos negros son.
Las herraduras son negras.
Sobre las capas relucen
manchas de tinta y de cera.
Tienen, por eso no lloran,
de plomo las calaveras.
Con el alma de charol
vienen por la carretera.
Jorobados y nocturnos,
por donde animan ordenan
silencios de goma oscura
y miedos de fina arena.
Pasan, si quieren pasar,
y ocultan en la cabeza
una vaga astronomía
de pistolas inconcretas.

1 comentario:

Anónimo dijo...

SIN CONVICCIÓN PERO COMO UN CLAVO.
ESO SÍ, CON LA HORA DE CANARIAS.
Sr. Quercus, veo con satisfacción que los comentarios se amontonan en este post…
¡Por fin, dos temas que me apasionan! ¡La poesía y la Guardia Civil!
Mi relación con la poesía viene de lejos y tiene un cierto interés desinteresado. En la actualidad no pasa por sus mejores momentos: es similar a la relación que establecieron los hermanos Cástor y Pólux entre sí. También recuerda, aunque de lejos, al futuro de los yanomami como pueblo. O para ser más claro, a un juego de suma cero: aún estoy esperando a las putas golondrinas.
Abandono el tono jocoso un momento: la memoria histórica es otra cosa. No quiero jugar con eso. Es vulgar citarse a uno mismo pero yo nunca he dicho que no fuera vulgar: si la historia no tiene memoria, ¿qué es?
Tras el excurso, sigo a lo mío: el otro asunto también.
Y para acabar, y sin la menor relación con los temas propuestos, le doy mi palabra de tahúr, me vienen a la memoria, aunque todo hay que decirlo, con la Wikipedia a mano, un par de reflexiones de dos tipos listos, el segundo mucho más simpático que el primero:
“De lo que no se puede hablar, se tiene que callar”. Wittgenstein
“En igualdad de condiciones la solución más sencilla es probablemente la más correcta. No ha de presumirse la existencia de más cosas que las absolutamente necesarias.” Guillermo de Occam
Wittgenstein aludía a la Metafísica, y es una de las reflexiones más conocidas de su”Tractatus Logico- Philosophicus”.
La segunda de las reflexiones hace referencia a la formulación del principio de “economía del pensamiento”, más conocido como la “navaja de Occam”. Excelente reflexión y excelente filósofo para una sociedad en tiempos de crisis económica.
Saludos,
Vicent.